Un sismo de magnitud 4, registrado a las 21:00 del domingo 23 de noviembre, alarmó a los habitantes de Guayaquil y sus alrededores. El Instituto Geofísico informó que el movimiento telúrico ocurrió a 12 kilómetros de Nobol, en la provincia del Guayas, con una profundidad de 56 kilómetros. Posteriormente, la magnitud fue ajustada a 3.9.

Horas antes, otro sismo de igual magnitud se reportó en Morona Santiago, en la Amazonía, sin que se registraran víctimas ni daños materiales.

Ecuador, al encontrarse dentro del Cinturón de Fuego del Pacífico, es escenario frecuente de actividad sísmica. Esta franja geológica, con forma de herradura, concentra las principales zonas de subducción del planeta y abarca países como Chile, Perú, Colombia, México, Estados Unidos y Canadá, entre otros.

El evento en Guayaquil no dejó reportes de afectaciones graves, pero generó preocupación en la población, que recordó la vulnerabilidad del país frente a los movimientos sísmicos.

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